sábado, 17 de noviembre de 2007


Media luna.


El sol

Se elevo bajó sobre tu vientre,

Tornándose en un remolino de caricias el viento.

Desvisto cada prenda de tu felina piel.

Transformando

El tacto mínimo

En un casi te amo…

Quizás si tú me besas

Sin el refrescante sentir de tus perlas.

Me convierta en media luna.

Madrugando en la boca calle

De tu ombligo,

Logrando que tu despertar

Fuese eterno

Conmigo…

Ahora, divulgo

Entre horizontes,

Que yo amo…

Y no lo digo.


Lucila paz.

Macarena dense Valderrama navarro.

2 comentarios:

victor Rocco dijo...

No digo que amo las mañanas de otoño, ni las estrellas que arrulla tu pelo, no digo lo que digo, no digo...no mejor...no lo digo.
chauuu besitos.

ambarnas dijo...

Que de las fuerzas comienza la fé y con la fé se corona el triunfo. Por que has ensangrentato cada corazón que revives con esplendor y cautivas cada hoja que se envuelve en tus escritos.

Diseñas de la obra su arte.




Saludos y abrazos... Y un lejano te quiero.



Desde Santiago muchos cariños.